Hay algo básico del embarazo que es importante entender: más allá de todas las interpretaciones y consideraciones que hagamos, el lugar, el escenario donde sucede todo es el cuerpo. En el cuerpo de la embarazada tienen lugar muchísimos cambios y transformaciones, que muchas veces ella registra y otras no.
Podríamos decir, incluso, que su yo es un yo corporal, su nivel de conciencia está puesto en el cuerpo y todo lo que éste emite y transmite. Al ser tan fuerte esta presencia, es importante que el abordaje que hagamos del embarazo lo tome en cuenta.
El Sistema Natal está basado en una técnica que integra el cuerpo-mente, y trabaja desde el cuerpo, que junto a maniobras corporales de la gimnasia de centros de energía dispara otra movilización emocional.
Cuando la mujer embarazada trabaja tempranamente con su cuerpo, lo que incorpora realmente lo va internalizando.
El Sistema Natal no se incorpora intelectualmente, porque si fuera así, fallaría. Por más información que una embarazada tenga, si sólo la tiene intelectualmente corre peligro que no le sirva. En cambio, cuando está incorporado en su cuerpo, todo el embarazo y el parto se adecúan, y los otros niveles también se ven beneficiados. Al trabajar el cuerpo, se trabajan todos los aspectos de la persona.
Es más: si el cuerpo cambia, cambia toda la persona. – Diana Wechsler
Gimnasia para embarazadas, Sistema Natal
Los beneficios que aporta son:
A NIVEL FÍSICO
Mayor agilidad, Mejor estado corporal, Mejor sueño, Alivia estado de tensiones o bloqueos, Más movilidad articular, por lo tanto, no dolores de cuello, cintura, etc. Evita edemas, várices, calambres, etc. Mejor sexualidad, Mayor energía en general, Mejor manejo del dolor, Mayor preparación para el parto, etc.
A NIVEL EMOCIONAL
Mejor control de la ansiedad, Mejor control de los miedos, Mejor estado de ánimo, Más madurez para atravesar procesos, Más recursos de autoasistencia, Mayor y mejor comprensión en las relaciones vinculares, Desarrollo de sus núcleos progresivos y disminución de sus núcleos regresivos, Más posibilidades de autocontención, Menor demanda, etc.
A NIVEL MENTAL
Más conocimiento teórico del proceso normal que va a vivir, Mayor conocimiento de la propuesta de su equipo médico, permitiéndole ser protagonista de su proceso y no mera espectadora, Mayor posibilidad de elección de las variables que operan en el embarazo de acuerdo a la época actual (basarse en su propia idea y no la que le impone el medio)
A NIVEL ESPIRITUAL
Más conciencia del hijo, Más conexión con el «TODO», Más apertura, Más confianza, Más armonía y bienestar, Más capacidad de dar y recibir amor.
El embarazo es un momento de mucha apertura y una oportunidad para iniciarse en este tipo de técnicas. Trabajando con la relajación permitimos que cada mujer se conecte consigo misma, con su bebé, y con la consciencia de pertenecer al género femenino que, a través de siglos, atravesó esta experiencia.