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Recomendaciones de la OMS para el parto

Recomendaciones de la OMS para una experiencia de parto positiva

Transformar la atención a mujeres y neonatos para mejorar su salud y bienestar

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado en su sitio web las nuevas recomendaciones para el parto, en las cuales coloca a la madre en el centro para una mejor experiencia durante el parto.

Son 56 las nuevas recomendaciones de la OMS. En ellas, se pone en evidencia la importancia de que la madre esté en el centro de toma de decisiones para una mejor experiencia durante y después del parto.

Las sugerencias de la OMS están divididas en cinco bloques: Cuidados durante el trabajo de parto y nacimiento, Primera fase del trabajo de parto, Segunda fase del trabajo de parto, Tercera fase del trabajo de parto y Cuidados del recién nacido.

En el primer bloque de Cuidados durante el trabajo de parto y nacimiento, por ejemplo, se incluye un cuidado maternal respetuoso, mantener una comunicación efectiva entre el personal médico y la madre, así como la elección de un acompañante durante el parto.

recomendaciones de la OMS en las 5 fases durante el proceso de parto.

Atención durante todo el trabajo de parto y el nacimiento

1.- Se recomienda la atención respetuosa de la maternidad, la cual remite a la atención organizada y proporcionada a todas las mujeres de manera que mantenga su dignidad, privacidad y confidencialidad, asegure la integridad física y el trato adecuado y permita tomar una decisión informada y recibir apoyo continuo durante el trabajo de parto y el parto.

2.- Se recomienda la comunicación efectiva entre los prestadores de atención y las mujeres en trabajo de parto mediante el uso de métodos simples y culturalmente aceptables.

3.- Se recomienda el acompañamiento de la mujer durante el trabajo de parto y el parto por la persona de su elección.

4.- Los modelos de continuidad asistencial impulsada por parteras – consistentes en que una partera conocida o un pequeño grupo de parteras conocidas brinda apoyo a una mujer a lo largo del continuo de servicios de atención prenatal, postnatal y durante el parto – se recomiendan para las embarazadas de entornos en los que existen programas de partería eficaces.

En el segundo bloque, que cubre la primera fase del trabajo de parto, se menciona que debería informarse a las madres que no hay una duración estándar establecida de la primera fase del parto, ya que esta puede variar de mujer a mujer. Además, la OMS ahora reconoce que aquel referente que indicaba que «lo normal» era que el cuello del útero se dilatara un centímetro cada hora es inexacto e irreal, y que no se recomienda tomarlo como referencia para saber si un parto va progresando de manera normal:

Período de dilatación

5.- Se recomienda para la práctica el uso de las siguientes definiciones de las fases latente y activa del período de dilatación.

— La fase latente del período de dilatación es un período que se caracteriza por contracciones uterinas dolorosas y cambios variables del cuello uterino, incluso con un cierto grado de borramiento y progresión más lenta de la dilatación hasta 5 cm para los primeros trabajos de parto y los subsecuentes.

— El período de dilatación activa es un período que se caracteriza por contracciones uterinas dolorosas y regulares con un grado importante de borramiento y dilatación más rápida del cuello uterino a partir de los 5 cm hasta la dilatación total para los primeros trabajos de parto y los subsecuentes.

6.- Se debe informar a las mujeres que no se ha establecido una duración estándar de la fase latente del período de dilatación y que puede variar ampliamente de una mujer a otra. Sin embargo, la duración de la fase activa del período de dilatación activa (a partir de los 5 cm hasta la dilatación total del cuello uterino) generalmente no excede las 12 horas en los primeros partos y, normalmente, no excede las 10 horas en los partos subsecuentes.

7.- Para las embarazadas con inicio del trabajo de parto espontáneo, el umbral de velocidad de dilatación del cuello uterino de 1 cm por hora durante la fase activa del período de dilatación (como se muestra en la línea de alerta del partograma) no es preciso para identificar a las mujeres que corren riesgo de sufrir resultados adversos del parto y, por ende, no se recomienda para este propósito.

8.- Una velocidad de dilatación del cuello uterino mínima de 1 cm por hora durante todo la fase activa del período de dilatación resulta irrealmente rápida para algunas mujeres y, por ende, no se recomienda para identificar una progresión normal del trabajo de parto. Una velocidad de dilatación del cuello uterino menor que 1 cm por hora no debe ser un indicador de rutina para la intervención obstétrica.

9.- Es posible que el trabajo de parto no se acelere naturalmente hasta alcanzar un umbral de dilatación del cuello uterino de 5 cm. Por consiguiente, no se recomienda el uso de intervenciones médicas para acelerar el trabajo de parto y el nacimiento (como la estimulación con oxitocina o la cesárea) antes de este umbral, siempre y cuando se aseguren las buenas condiciones del feto y de la madre.

10.- Para las embarazadas sanas con trabajo de parto espontáneo, se recomienda una política de demora del ingreso a la sala de preparto hasta el período de dilatación activa, únicamente en el contexto de la investigación rigurosa.

11.- No se recomienda la pelvimetría clínica de rutina en el ingreso para el parto en embarazadas sanas.

12.- No se recomienda la cardiotocografía de rutina para la evaluación del bienestar del feto en el ingreso para el parto en embarazadas sanas que presentan trabajo de parto espontáneo.

13.- Se recomienda la auscultación mediante un dispositivo de ecografía Doppler o estetoscopio de Pinard para evaluar el bienestar del feto en el ingreso para el parto.

14.- No se recomienda el rasurado púbico o perineal de rutina antes del parto vaginal.

15.- No se recomienda realizar enemas para reducir el uso de la conducción del trabajo de parto.

16.- Se recomienda realizar un tacto vaginal a intervalos de cuatro horas para valoración de rutina e identificación de la prolongación del trabajo de parto activo.b

17.- No se recomienda la cardiotocografía continua para evaluar el bienestar del feto en embarazadas sanas con trabajo de parto espontáneo.

18.- Se recomienda la auscultación intermitente de la frecuencia cardíaca fetal ya sea mediante un dispositivo de ecografía Doppler o un estetoscopio de Pinard para embarazadas sanas en trabajo de parto.

19.- Se recomienda la anestesia peridural para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer.

20.- Los opioides de administración parenteral, como fenatilo, diamorfina y petidina, son opciones recomendadas para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer.

21.- Se recomiendan técnicas de relajación, incluso la relajación muscular progresiva, respiración, música, meditación atención plena (mindfulness)y otras técnicas, para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer.

22.- Se recomiendan técnicas manuales, como masajes o aplicación de compresas tibias, para embarazadas sanas que solicitan alivio del dolor durante el trabajo de parto, dependiendo de las preferencias de la mujer.

23.- No se recomienda el alivio del dolor para evitar y reducir el uso de conducción en el trabajo de parto.

24.- Para las mujeres con bajo riesgo, se recomienda la ingesta de líquidos y alimentos durante el trabajo de parto.

Se recomienda alentar la movilidad y adoptar una posición erguida durante el trabajo de parto en mujeres de bajo riesgo

26.- No se recomienda la irrigación vaginal de rutina con clorhexidina durante el trabajo de parto para prevenir infecciones.

27.- No se recomienda aplicar un paquete de cuidados para el manejo activo del trabajo de parto para la prevención del retraso del trabajo de parto.

28.- No se recomienda el uso aislado de amniotomía para prevenir el retraso en el trabajo de parto.

29.- No se recomienda el uso temprano de la amniotomía con conducción temprana con oxitocina para la prevención del retraso del trabajo de parto.

30.- No se recomienda el uso de oxitocina para la prevención del retraso del trabajo de parto en mujeres sometidas a analgesia peridural.

31.- No se recomienda el uso de antiespasmódicos para la prevención del retraso del trabajo de parto.

32.- No se recomienda el uso de líquidos intravenosos para abreviar la duración del trabajo de parto.

Período expulsivo
El tercer bloque, correspondiente a la segunda fase del trabajo de parto, se toca el tema de la posición para el momento de dar a luz, y en los que se indica que -independientemente de si se utilizó la epidural o no- la madre tiene derecho de elegir la posición que le sea más cómoda, y además, no se le debe presionar para que puje hasta que ella lo sienta necesario. Por otro lado, la OMS no recomienda la realización de episiotomías a menos que sea realmente necesario:

33.- Se recomienda para la práctica clínica el uso de la siguiente definición y duración del período expulsivo.

— El período expulsivo es el período comprendido entre la dilatación total del cuello uterino y el nacimiento del bebé durante el cual la mujer tiene un deseo involuntario de pujar como resultado de las contracciones uterinas expulsivas.

— Se debe informar a las mujeres que la duración del período expulsivo varía de una mujer a otra. En los primeros partos, el nacimiento se completa normalmente en 3 horas, en tanto en los partos subsecuentes, el nacimiento se completa por lo general en 2 horas.

34.- Para las mujeres sin anestesia peridural, se recomienda alentar la adopción de una posición para dar a luz que sea de su elección, inclusive las posiciones erguidas.

35.- Para las mujeres con anestesia peridural, se recomienda alentar la adopción de una posición para dar a luz que sea de su elección, inclusive las posiciones erguidas.

36.- Se debe alentar y asistir a las mujeres en el período expulsivo para que sigan su propia necesidad de pujar.

37.- En el caso de mujeres con anestesia peridural en el período expulsivo, se recomienda retrasar la acción de pujar durante una a dos horas después de la dilatación total o hasta que la mujer recupere la necesidad sensorial de pujar en los contextos que cuenten con recursos disponibles para prolongar el período expulsivo y evaluar y controlar adecuadamente la hipoxia perinatal.

38.- En el caso de mujeres en el período expulsivo, se recomiendan técnicas para reducir el traumatismo perineal y facilitar el nacimiento espontáneo (inclusive los masajes perineales, compresas tibias y conducta de protección activa del perineo), en función de las preferencias de la mujer y las opciones disponibles.

39.- No se recomienda el uso ampliado o de rutina de la episiotomía en mujeres que presentan un parto vaginal espontáneo.

40.- No se recomienda la aplicación de presión del fondo uterino para facilitar el parto durante el período expulsivo.

Alumbramiento
En el cuarto bloque, donde se habla de la tercera fase del parto, una de las recomendaciones es el corte tardío del cordón umbilical, para lo cual se sugiere esperar por lo menos un minuto y así los bebés puedan obtener mayores beneficios para su salud:

41.- Se recomienda para todos los nacimientos el uso de uterotónicos para prevenir la hemorragia posparto (HPP) durante el alumbramiento.

42.- La oxitocina (10 UI, IM/IV) es el medicamento uterotónico recomendado para prevenir la hemorragia posparto (HPP).

43.- Para los entornos en los que la oxitocina no está disponible, se recomienda el uso de otros uterotónicos inyectables (si corresponde, ergometrina/metilergometrina o la politerapia fija de oxitocina y ergometrina) o misoprostol por vía oral (600 µg).

44.- Se recomienda el pinzamiento tardío del cordón umbilical (no menos de 1 minuto después del nacimiento) para mejores resultados de salud y nutrición para la madre y el bebé.

45.- Para los entornos en los que existen asistentes obstétricos especializados disponibles, se recomienda la tracción controlada del cordón (TCC) para los partos vaginales si el prestador de atención de salud y la parturienta consideran que una pequeña reducción en la pérdida de sangre y una pequeña reducción en la duración del alumbramiento son importantes.

46.- No se recomienda el masaje uterino sostenido como una intervención para prevenir la hemorragia posparto (HPP) en mujeres a las que se les ha administrado oxitocina como medida profiláctica.

Atención del recién nacido
Para los cuidados del recién nacido y a la mujer tras el parto, la OMS recomienda practicar el contacto piel con piel durante la primera hora después del parto para prevenir hipotermia y ayudar a iniciar la lactancia. Otras recomendaciones, son esperar al menos 24 horas antes de darle un baño al bebé, así como no separarlo de su madre y que permanezcan juntos en la habitación del hospital las 24 horas:

47.- En neonatos nacidos con líquido amniótico claro que comienzan a respirar por su propia cuenta al nacer, no se debe realizar la aspiración de la boca y la nariz.

48.- Se debe mantener a los recién nacidos sin complicaciones en contacto piel con piel (CPP) con sus madres durante la primera hora después del nacimiento para prevenir la hipotermia y promover la lactancia.

49.- Todos los recién nacidos, incluso los bebés con bajo peso al nacer (BPN) que pueden amamantarse, se deben colocar al pecho tan pronto como sea posible después del nacimiento tras corroborar la estabilidad clínica, y en tanto la madre y el bebé estén listos.

50.- Se debe administrar a todos los recién nacidos 1 mg de vitamina K por vía intramuscular después del nacimiento (es decir, después de la primera hora en la cual el lactante debería estar en contacto piel con piel con la madre e iniciada la lactancia).

51.- El baño se debe retrasar hasta 24 horas después del nacimiento. Si esto no es posible por motivos culturales, el baño se debe retrasar al menos seis horas. Se recomienda vestir al recién nacido con prendas adecuadas a la temperatura ambiente. Esto significa de una a dos capas de prendas más que los adultos, además del uso de sombreros o gorros. La madre y el bebé no deben estar separados y deben permanecer en la misma habitación las 24 horas del día.

Atención de la mujer tras el nacimiento

52.- Se recomienda para todas las mujeres la evaluación postparto abdominal del tono muscular del útero para identificar de forma temprana la atonía uterina.

53.- No se recomienda la profilaxis antibiótica de rutina para mujeres con parto vaginal sin complicaciones.

54.- No se recomienda la profilaxis antibiótica de rutina para mujeres con episiotomía.

55.- Durante el puerperio, a todas las mujeres se les debe hacer un examen de rutina de hemorragia vaginal, contracción uterina, altura del fondo uterino, temperatura y frecuencia cardíaca (pulso) durante las primeras 24 horas a partir de la primera hora posterior al parto. La presión arterial debe tomarse poco después del nacimiento. Si la presión es normal, deberá tomarse nuevamente en el plazo de seis horas. La orina se debe documentar en el lapso de seis horas.

56.- Después de un parto vaginal sin complicaciones en un centro de atención de salud, las madres y los recién nacidos sanos deben recibir atención en el centro durante al menos 24 horas después del nacimiento.

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Audiencia destinataria
Las recomendaciones de esta directriz tienen por objeto informar sobre el desarrollo de políticas de salud y protocolos clínicos pertinentes a nivel nacional y local. Por lo tanto, los principales destinatarios de la presente directriz son los responsables de la formulación de políticas de salud pública a nivel nacional y local, los responsables de la implementación y la administración de programas de salud maternos e infantiles, los administradores de centros de atención de salud, las organizaciones no gubernamentales (ONG), las sociedades de profesionales que participan en la planificación y administración de los servicios de salud maternos e infantiles, los profesionales sanitarios (incluidos enfermeros, parteras, médicos de cabecera y obstetras) y el personal académico encargado de capacitar a los profesionales sanitarios.